Iglesia de Santa María la Blanca - Leza de Río Leza, La Rioja

susana jimenez

La iglesia de Santa María la Blanca es un
edificio de nueva planta realizado en el siglo XV en una nave
de tres tramos cubiertos con bóveda gótica de terceletes; la
capilla de San Miguel parece la más antigua añadida a la nave
a principios del siglo XVI, la siguieron a lo largo del mismo
siglo la capilla del Cristo, también en el segundo tramo,
y las dos del primero, la capilla de la Virgen del Rosario, donde
recientemente se ha ubicado la pila bautismal de copa del
siglo XVI al desaparecer el baptisterio, y la capilla del arzobispo
de Granada don Pedro Guerrero, ambas obras del cantero
Juan de Alzaga, estando cubiertas con bóvedas góticas
estrelladas. En el mismo siglo se añadió la torre situada al norte
del último tramo, con un esbelto fuste que deja ver algunas
tracerías góticas del XV reutilizadas, y que se culmina con un
cuerpo de campanario de con huecos de medio punto posiblemente
del XVII. En el siglo XVIII la iglesia sufrió una nueva
remodelación, añadiéndose entonces la cabecera ochavada
en tres paños para albergar el retablo mayor, la sacristía al
sur de la cabecera, y el pórtico al norte del segundo tramo cobijando
el ingreso apuntado.
En la cabecera ochavada añadida se ubicó el retablo mayor
de estilo rococó de la segunda mitad del XVIII, cuya arquitectura
es de Feliciano Pérez Ortíz en 1770, inspirado en el de Ribafrecha.
Consta de banco, cuerpo y ático en horno, en tres calles,
y fue policromado hacia 1795 por Juan Gallardo, con la
imagen de Asunción entre las de San Martín y San Roque en
el primer cuerpo.
Hemos de hacer una mención especial a la capilla del Arzobispo
Guerrero, separada de la nave mediante una reja de
hierro y chapa en crestería con grutescos y con las armas del
Arzobispo Guerrero de mediados del XVI; tiene dos retablitos,
el de San Martín con la imagen del Obispo hispanoflamenca
del XV-XVI, y el de Cristo y la Magdalena, centrado en la pintura
del siglo XVI en tabla del Cristo Crucificado con la Magdalena
a sus pies, entre San Pedro y San Pablo.
En la capilla de San Miguel, está un retablito de un cuerpo
del siglo XVII, dorado en 1668 por Gregorio Delgado, con su
imagen y la pintura en tabla del Juicio Final. En la capilla de
la Virgen del Rosario, hay un bello retablo compuesto por zó-
calo, cuerpo, y ático en tres calles, obra de Fernando Espeleta
del siglo XVII; y el retablo de la Dolorosa, barroco de la primera
mitad del XVIII. Finalmente en la capilla del Cristo tenemos
un bello retablito de un cuerpo con corintias entorchadas y
frontón redondo roto también de Fernando de Ezpeleta, con
imagen del Crucifijo.
Pero quizás el mayor atractivo de esta iglesia se encuentre
en sus tallas más antiguas. La más relevante es la imagen de
Nuestra Señora del Plano, una talla gótica sedente del siglo XIV
que está muy repintada y en la que destaca la elaboración de
los pliegues de los mantos de la Virgen y del Niño, así como
la posición del niño con las piernas entrecruzadas, conservando
del románico la bendición y el libro cerrado del Niño.
Esta talla parece que es una réplica de otra románica, que conserva
la policromía, pero que lamentablemente fue mutilada
para ser utilizada como Virgen de vestir, tiene los escudos de
Castilla y León en la peana;

Mercedes del Río

Bonita iglesia y muy cuidada por algunas personas del pueblo. Pena que no haya dinero para restaurarla

Miriam Cabezon